Los tocadiscos tienen un encanto particular que nunca pasa de moda. No importa cuántas innovaciones tecnológicas existan, los vinilos y los tocadiscos mantienen ese aura nostálgica y auténtica. Pero, ¿alguna vez te has preguntado cómo funciona un tocadiscos? Vamos a desglosar todos los elementos que lo componen y cómo estos permiten que el sonido grabado en un disco de vinilo cobre vida.
A lo largo de mi vida, he tenido la suerte de probar muchos tocadiscos, desde los modelos más básicos hasta los de gama alta. Cada uno tiene sus particularidades, pero todos comparten los mismos principios fundamentales de funcionamiento. Aquí te explico todo, paso a paso.
El principio básico: ¿Cómo se graba el sonido en un vinilo?
Antes de hablar de cómo funciona un tocadiscos, es esencial entender cómo se graba el sonido en un vinilo. Un disco de vinilo no es más que una grabación física del sonido, es decir, una representación en forma de surcos. Durante el proceso de grabación, el sonido se convierte en vibraciones que, a su vez, son transformadas en movimientos físicos de una aguja grabadora. Esta aguja crea surcos microscópicos en la superficie del vinilo. Cuando más tarde reproduces ese disco en un tocadiscos, otra aguja, llamada aguja fonocaptora o stylus, «lee» esos surcos y convierte nuevamente esas vibraciones en sonido. ¡Magia pura!
Si te interesa conocer más en profundidad cómo se fabrica un disco vinilo, te recomendamos que le eches un vistazo el artículo que hemos preparado aquí.
Los surcos pueden variar en profundidad y anchura, lo que representa diferentes frecuencias y amplitudes de sonido. Es por eso que el tocadiscos debe ser extremadamente preciso: cualquier desviación mínima en la velocidad o posición de la aguja puede alterar la calidad del sonido.
Partes fundamentales de un tocadiscos y su funcionamiento
Para entender bien cómo funciona un tocadiscos, vamos a desglosar cada una de sus partes principales:
1. El plato
El plato es la parte donde colocas el disco de vinilo. Este debe girar a una velocidad constante y precisa para asegurar que la aguja pueda leer correctamente los surcos. Los tocadiscos suelen tener dos velocidades estándar: 33 1/3 RPM (Revoluciones por minuto) para LPs y 45 RPM para sencillos. Algunos modelos antiguos también soportan 78 RPM, utilizados para discos más viejos.
Existen dos tipos de tracción para el plato:
- Tracción por correa: Un motor pequeño acciona una correa elástica que gira el plato. Este sistema es conocido por reducir vibraciones, mejorando la calidad de sonido.
- Tracción directa: En este caso, el motor está directamente conectado al plato. Es más robusto y preciso, por lo que es la elección preferida por DJs. Sin embargo, al estar el motor tan cerca, puede transmitir vibraciones al disco.
2. El brazo
El brazo del tocadiscos sostiene la aguja y debe moverse suavemente sobre el disco, permitiendo que la aguja descanse en los surcos. Los brazos pueden ser:
- Manuales: El usuario debe levantar el brazo y colocarlo sobre el disco manualmente.
- Automáticos: El brazo se posiciona automáticamente al presionar un botón.
Un aspecto crítico es el contrapeso del brazo. Este ajusta la presión que la aguja ejerce sobre el vinilo. Si la presión es demasiado alta, puede dañar el disco, y si es demasiado baja, puede causar un sonido deficiente.
3. La cápsula y la aguja
La cápsula es la encargada de convertir las vibraciones capturadas por la aguja en señales eléctricas. Hay dos tipos principales de cápsulas:
- Magnéticas (MM): Utilizadas en la mayoría de los tocadiscos de gama media y alta. Ofrecen una excelente calidad de sonido y son más duraderas.
- De bobina móvil (MC): Son más sofisticadas y, por lo tanto, más caras. Se encuentran en los tocadiscos de alta gama y ofrecen una fidelidad de sonido superior.
La aguja (stylus) es la parte que entra en contacto directo con el vinilo. Las agujas pueden estar hechas de diferentes materiales, pero las de diamante son las más comunes debido a su durabilidad.
4. El preamplificador
La señal que genera la cápsula es muy débil, por lo que necesita ser amplificada antes de que pueda ser enviada a los altavoces. Aquí es donde entra en juego el preamplificador. Algunos tocadiscos ya lo traen incorporado, pero en muchos casos tendrás que comprar uno aparte.
El proceso de reproducción: de surcos a sonido
El funcionamiento de un tocadiscos puede parecer simple: colocas el vinilo, bajas la aguja y el sonido comienza a fluir. Pero detrás de ese gesto hay un proceso mecánico y electrónico fascinante.
- Colocas el vinilo en el plato. Asegúrate de seleccionar la velocidad correcta (33 1/3 RPM o 45 RPM, según el disco que estés usando).
- Bajas el brazo para que la aguja toque el surco del disco. Aquí es donde la magia sucede. La aguja se mueve a través de los surcos, capturando las vibraciones mecánicas que están grabadas.
- La cápsula convierte esas vibraciones en una señal eléctrica. Como mencioné antes, la cápsula puede ser magnética o de bobina móvil, y su trabajo es transformar las vibraciones de la aguja en una señal que pueda ser amplificada.
- La señal eléctrica pasa al preamplificador, que aumenta su nivel. La señal amplificada se envía a un amplificador principal o directamente a los altavoces, dependiendo de tu configuración.
- El sonido emerge de los altavoces. Es una experiencia auditiva analógica, cálida y con matices que los formatos digitales simplemente no pueden replicar.
Si todo esto te parece un poco complicado de entender, te dejo a continuación un vídeo explicativo:
¿Cómo se fabrica un tocadiscos?
Te puedes preguntar cómo es el proceso de fabricación de un tocadiscos. Éste es tanto artesanal como industrial, pero en ambos casos cada componente debe ser creado con precisión para asegurar un rendimiento óptimo.
1. Materiales del plato
El plato puede estar hecho de diferentes materiales, como aluminio, acrílico o incluso vidrio. Lo más importante es que sea lo suficientemente pesado para mantener la estabilidad y reducir las vibraciones.
2. Brazo de precisión
El brazo suele estar hecho de aluminio o fibra de carbono, ya que estos materiales son ligeros pero resistentes. El brazo debe ser fabricado con una precisión extrema para asegurarse de que la aguja pueda moverse suavemente sobre el disco.
3. Montaje del motor y sistema de tracción
El motor es el corazón del tocadiscos. En los modelos de tracción por correa, el motor se coloca cuidadosamente para minimizar las vibraciones. En los de tracción directa, se ensambla de manera que el plato gire de forma suave y sin interrupciones.
Precios de tocadiscos en España
El precio de un tocadiscos puede variar enormemente dependiendo de sus características y la calidad de los materiales utilizados. Aquí te dejo una guía aproximada de precios en España:
- Modelos de gama baja: Desde 100€ hasta 200€, ideales para iniciarse en el mundo del vinilo. Un ejemplo es el Audio-Technica AT-LP60X.
- Gama media: Entre 300€ y 600€, con mejor calidad de sonido y más funciones. El Denon DP-300F es una opción excelente en este rango de precios.
- Alta gama: Más de 1000€, diseñados para audiófilos que buscan la máxima fidelidad de sonido. El Rega Planar 3 es un ejemplo de tocadiscos premium.
Conclusión: El arte y la ciencia detrás de un tocadiscos
Entender cómo funciona un tocadiscos no solo te hará apreciar más la música en vinilo, sino que también te permitirá tomar decisiones informadas a la hora de comprar uno. Desde la precisión del plato hasta la sensibilidad de la aguja, cada componente juega un papel esencial en la calidad del sonido.
Si estás pensando en adquirir un tocadiscos o simplemente quieres conocer más sobre su funcionamiento, ahora tienes las bases para entender cómo esta increíble máquina convierte los surcos de un disco en una experiencia auditiva incomparable.